Para completar el "asunto" de la ministra de Igualdad, Bibiana Aído, he encontrado en el blog INDESINENTER de Vicente Carballido, un artículo de la periodista Pilar Cernuda para el diario digital EuropaSur, titulado "Que la echen! No tiene desperdicio. Lo reproduzco a continuación.
La vicepresidenta del Gobierno ha tenido que salir a escena para descalificar unas declaraciones de la ministra de Igualdad. El día anterior era el ministro de Cultura el que se veía obligado a rectificar a Bibiana Aído, y entre los socialistas que están en la pomada se dice que Aído se ha convertido en un peligro público y hace más daño al Gobierno que toda la oposición junta.
La vicepresidenta del Gobierno ha tenido que salir a escena para descalificar unas declaraciones de la ministra de Igualdad. El día anterior era el ministro de Cultura el que se veía obligado a rectificar a Bibiana Aído, y entre los socialistas que están en la pomada se dice que Aído se ha convertido en un peligro público y hace más daño al Gobierno que toda la oposición junta.
El nombramiento de Aído ha sido un error, inmenso error. En primer lugar, por el ministerio en sí; ni se necesita ni se comprende para qué lo quiere Zapatero; todo lo que tiene que ver con Igualdad se lleva a Justicia, Trabajo, Interior o incluso Sanidad. Para ese viaje no hacían falta las alforjas, Aído. En segundo lugar, y más importante, la ministra va de ridículo en ridículo, de bobada en bobada... hasta la derrota final. Porque al final de esa trayectoria demencial no queda más que ponerla en la calle, echarla del Gobierno. Cualquer otra solución que pase por mantenerla da pie a la oposición para poner de vuelta y media al Gobierno y da pie al Gobierno para ponerse rojo de vergüenza.
Primero fue el famoso teléfono de los maltratadores, después los miembras y miembros, a continuación las bibliotecas sólo para mujeres y con libros escritos por mujeres, más tarde "inferiorizar", y ahora ha puesto en un brete al Gobierno, otro más, con su peculiar teoría sobre la vestimenta de las mujeres musulmanas, lo que ha obligado a Fernández de la Vega a rectificarla para explicar que en este país nuestro en el que una mujer como Aído ha llegado a ministra las mujeres musulmanas pueden vestir como marquen sus tradiciones siempre que cumplan la legislación vigente.
Esta ministra deja en pésimo lugar a las mujeres. Esta ministra incapaz, inconsistente, que frivoliza con lo más serio, que utiliza una terminología ridícula y que se deja llevar por el feminismo radical, que es el principal enemigo del feminismo, provoca que los que aún muestran reticencias a ver a las mujeres en puestos de responsabilidad se crean cargados de razón para rechazar a mujeres para ocupar esos cargos. Es lo peor que les podía pasar a quienes pelean por la igualdad de las mujeres.
Los españoles, todos, merecen mejor trato. Merecen que todos y cada uno de los miembros del Gobierno se planteen su trabajo con seriedad, que sean reflejo de lo mejor que hay en España, que presenten iniciativas solventes, que sepan lo que traen entre manos y que no suelten frases que provocan auténtico sonrojo.
Los españoles merecen que Zapatero dedique cinco segundos a reflexionar sobre lo que está haciendo Aído. Sólo cinco segundos, no más: suficientes para darse cuenta de que se ha equivocado y que lo mejor que puede hacer es enviarla de nuevo a Alcalá de los Gazules.
También aqui en este post quiero hacer mi pequeño comentario.
ResponderEliminarEvidentemente no quiero hacer demagogia sobre si socialistas si, socialistas no, por los continuos "deslices" de nuestra ministra de Igualdad. Solamente mi completo apoyo a la opinión de la periodista Pilar Cernuda, flaco favor está haciendo Doña Bibiana al gobierno del Sr. Zapatero con sus continuas salidas de "pata de banco".
Julio
Muy buenos los comentarios, yo quería exponer mi humilde opinión sobre la igualdad, creo que desde el momento que se crea un ministerio de igualdad empieza la desigualdad, ya que confundimos términos y mezclamos conceptos de feminismo y machismo, creo que somos personas y que no podemos ser iguales ya que desde que nacemos ya somos diferentes, somos hombres y mujeres, gracias a Dios, yo quiero los mismo derechos como personas que somos, no igualdad; es mi modesta opinión, y sobre "el bonito palabro" que usó la señora ministra, que supongo es "un pelín" más culta que yo y tendrá mas estudios, ¿cómo se le puede pegar semejante patada al diccionario, para ella quedara muy bien lo de "miembras" y si jugamos a quitar los genéricos, nos quedamos sin brazos y piernas que creo que se les llaman miembros, y ¿el pene es una miembra o es miembro?, si ya no se ni lo que tenemos.
ResponderEliminarY me parece bien que las mujeres queramos que se nos reconozca como tal, pero tengamos más cabeza y no diga sandeces, por no decir algo más gordo, me da vergüenza ser mujer a veces, y a la señora ministra le recomiendo que se de una vuelta por el diccionario de la Real Academia de la Lengua.
Le dejo aquí el primer artículo de la RAE, para que lo lea.
El artículo primero de los estatutos de la RAE dice:
«[...] tiene como misión principal velar por que los cambios que experimente la Lengua Española en su constante adaptación a las necesidades de sus hablantes no quiebren la esencial unidad que mantiene en todo el ámbito hispánico. Debe cuidar igualmente de que esta evolución conserve el genio propio de la lengua, tal como ha ido consolidándose con el correr de los siglos, así como de establecer y difundir los criterios de propiedad y corrección, y de contribuir a su esplendor. Para alcanzar dichos fines, estudiará e impulsará los estudios sobre la historia y sobre el presente del español, divulgará los escritos literarios, especialmente clásicos, y no literarios, que juzgue importantes para el conocimiento de tales cuestiones, y procurará mantener vivo el recuerdo de quienes, en España o en América, han cultivado con gloria nuestra lengua. Como miembro de la Asociación de Academias de la Lengua Española, mantendrá especial relación con las Academias Correspondientes y Asociadas.»
CREO QUE ESTA SEÑORA NO RESPETA NI A SU PAÍS Y NI A SU CULTURA Y ES UN MAL EJEMPLO PARA LOS QUE NOS SENTIMOS ESPAÑOLES EN TODOS LOS ÁMBITOS.
Sobre el segundo texto me gustaría comentar algo aunque estén ligados los dos textos, yo no soy de ningún partido político, pero creo que aprovechar la coyuntura para tirar a un partido u a otro por tierra no es justo son las personas que tienen esa afiliación, lo que deben hacer el resto de componentes es ser juiciosos ya que eso va en detrimento de los partidos y de luchar por que se hable bien que es lo que importa, ya que pierde o se le da menos valor al hecho de la señora ministra cuando empezamos a tirar tierra sobre los partidos políticos.
UN BESO MARY (te quiero mi amor)