......muchos momentos especiales.
Así quiero empezar el post del Viernes Santo, como terminé el anterior post, con la visita al patio de salida para ver a los Titulares ya preparados para poner en marcha y surge la causalidad, comenta un gran amigo de visitar el Monasterio de San Jerónimo y a la Cofradia de la Soledad que también hace Estación de penitencia el Viernes Santo, vemos a los Titulares, disfrutamos del magnífico entorno del Monasterio, (ese es otro de rincones de Granada que tengo en mente mostraros) y disfruto con la contemplación de ese precioso Cristo Yacente que sacan en procesión obra de Pablo de Rojas, gran maestro imaginero del siglo XVI-XVII. Aquí os dejo esta imagen del mismo:
Y la causalidad surge porque es la única Cofradía que no realiza Estación de Penitencia en la tarde/noche del Viernes Santo.
Son las 3 de la tarde, hora de la muerte de Jesús de Nazaret, en Granada lo recordamos asistiendo al Campo del Príncipe a rezar con el Señor de los Favores, un crucificado en piedra que preside dicha plaza, yo lo voy escuchando por la radio, mis pasos se encaminan hacia el lado opuesto de Granada, por la avenida de la Constitución hacia la Iglesia de San Juan de Letrán, donde empieza a reunirse la Cofradia de los Ferroviarios para comenzar a montar el cortejo procesional.
Llegan las primera emociones, esos abrazos con los que hace unos años eran "mis niños", los costaleros que yo mandaba y que me demuestran que el trabajo que realicé fue bueno, pues me abrazan con cariño, fuerte. A todos les enseñé a andar debajo de un paso, a colocarse la faja, me vuelve a tocar fajar a alguno de esos veteranos ya de la cuadrilla, como los que aparecen en la imagen, no están todos los que son, pero si son todos los que están, el que menos tiene 12 semanas santas en sus hombros, a que sí Víctor?
Se pone en marcha el cortejo, son las 16'15 y la Cruz de Guía hace su aparición en la puerta, tengo un lugar privilegiado para observar detenidamente la salida a la calle de mi Hermandad, muy cerquita de la puerta y acompañado de un gran hermano, que por motivos x no puede salir esta año (otra gran causalidad), charlamos y disfrutamos de la salida a la calle de nuestro Cristo de la Buena Muerte y de Nuestra Señora del Amor y del Trabajo que va preciosa de flor. Gracias Andrés por ese magnífico rato que pasé a tu lado en la salida de nuestra Cofradía, ojalá el año que viene la hagamos de otra manera, seguro que si.
El Cristo de la Buena Muerte avanza por el bulevar de la Constitución majestuoso en su caminar, sonando limpios los redobles de tambor y las notas de las trompetas, y demás instrumentos, de la Banda del Dulce Nombre, ¡genial la labor que haces, querido Felipe!. Empiezo a mostrar ya sin ningún género de dudas la sonrisa que no me abandonará ya, y que se hará enorme unas horas después cuando mis hombros vuelvan a tocar esa trabajadera, cuando mis ojos vuelvan a mirar en la penumbras las cabezas de esas personas que lo llevan con todo su amor, con todo su corazón y cuando mis oidos vuelvan a escuchar una marcha que suena distinta cuando realizas el trabajo de llevar a Jesús, muerto en la cruz.
Y avanza la Gran Vía, abrazos, saludos, emociones que no dejarán de acompañarme cuando me encuentro a algun antiguo miembro de la cuadrilla, a alguna novia, mujer, compañera de costaleros, a alguna madre que me abraza y me dice lo mucho que me aprecian tanto ella como sus hijos que ha sido costaleros. Agradezco el café al que soy invitado por parte de la familia de mi niño grande, familia de Enrique, sois geniales de verdad y os quiero como si fuerais mi propia familia. Plaza de Isabel la Católica, calle Pavaneras, giro a San Matías y lo veo avanzar de espaldas rumbo a la carrera oficial...
Me tomo un tiempo de descanso, no puedo acompañar a mi Cristo en el recorrido oficial y hago un "kit-kat" para verlo en la televisión, para verlo discurrir por Ganivet, Mesones, hasta llegar a la Iglesia Catedral granadina y salir por la Puerta del Perdón y enfilar la calle San Jerónimo donde vuelvo a incorporarme, comienza a acercarse ese momento de íntima comunicación con Él. No quiero repetirme, pero son momentos de más abrazos, de mas saludos, de más charla con algun padre orgulloso de sus hijos que van debajo, ¿a que si, Juan? y de la llegada del Cristo a la Basílica de San Juan de Dios, copatrón de Granada y el silencio se rompe por una saeta, bellamente cantada por un hermano de la Orden Hospitalaria, que belleza de sonidos que presagian la belleza sentimental de momento donde le dejo el chubasquero a Juan, al anteriormente citado Juan y recibo (y doy) un fuerte abrazo a Javi Palacios, porque voy a ocupar su sitio en la pata trasera izquierda del Cristo de la Buena Muerte........
Al salir de debajo siento que mi corazón se ha llenado y se demuestra en mi cara en la sonrisa feliz que muestro y que siento hacia muy dentro de mi. Mil abrazos, el primero nuevamente con Javi al cederle su puesto y uno que me llena el que le doy a mi "hermano" a mi niño, a una de las personas que más quiero del mundo y que él lo sabe, es mi hermano menor, aquel con el que hemos pasado momentos muy amargos y las mayores alegrías tanto dentro como fuera de la Cofradía... Si Víctor, no hace falta decirlo porque sabes que te quiero un montón.
Y nos vamos acercando al final, recorremos los últimos metros del Bulevar donde nos acompañan las imagenes de grandes granadinos realizadas en bronce, desde el Gran Capitán hasta Frascuelo, pasando por Lorca, P. A. de Alarcón, San Juan de la Cruz, la reina Victoria Eugenia y llega el final, la puerta de la capilla donde de una forma ligera pero sin prisas, han comenzado a caer unas gotas, Cristo y Virgen se encierran dando por finalizada la Estación de Penitencia del Viernes Santo del 2013....
Se te ve feliz, Julio. Y no es para menos. Emocionante y belleza "pasional" en todos los sentidos.
ResponderEliminarUn beso.
Consuelo
Fue un día inovidable, por muchos aspectos, todos los que he contado y aquellos "detallitos" que no he contado y que se quedan dentro mi corazón para toda la vida.
EliminarGraciass
Julio.
Grande Julio. Te felicito por tu capacidad de emoción, que nunca se apague.
ResponderEliminarGracias por tus palabras. Eso intentaré que nunca se apague la emoción de transmitir sentimientos y la capacidad de emocionar on elllos.
EliminarSaludos
Julio
Muy emotivo!!!!
ResponderEliminarGracias!! En efecto, el sentimiento me puede cuando hablo de mi Cristo, de mi Cofradía y de mi experiencia con ellos.
EliminarBesos
Julio